El punto medio..Renault ofrece, con el Scénic, un monovolumen correcto. No tiene ningún elemento sorprendente o novedoso, como alguno de sus rivales, y tampoco hay ningún aspecto criticable. Es un coche que quizá no entusiasme, pero que difícilmente defraudará.
Mediado el año pasado, Renault modificó pequeños detalles de su oferta con el Scénic y Grand Scénic. No hay grandes novedades, ni en equipamiento ni en aspectos estéticos, por lo que sigue siendo un coche recomendable, ni caro ni barato, sin equipamiento sobresaliente, pero con todo lo imprescindible, con una habitabilidad razonable, ni ancho ni estrecho (en comparación con sus competidores), ni corto ni largo. Se trata, en suma, de un coche logrado, que no destaca en ningún aspecto, ni por lo bueno ni por lo malo.
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